También conocida como Deformidad de Boutonnière, la lesión del tendón extensor central es una deformidad característica del dedo, en la que la articulación interfalángica proximal del dedo (su sigla es IFP), se flexiona hacia abajo y la articulación interfalángica distal (su sigla es IFD) se hiperextende.
La Deformidad de Boutonnière es causada por una lesión del tendón extensor central del dedo. La mayoría de las veces ocurre por traumatismo y el mecanismo es el de flexión de la interfalángica proximal con el dedo en extensión. Después del trauma, y durante algunos días, el paciente es capaz de extender la IFP gracias a la acción de los tendones extensores laterales.
A continuación, la cabeza de la falange proximal penetra entre los tendones extensores laterales, como si éstos fueran un «ojal», de ahí viene el nombre dedo en botón.
Este tendón se lesiona con frecuencia cuando un dedo extendido se flexiona la fuerza, o se desplaza hacia la palma de la mano, o por laceración en el dorso del dedo, cerca de la articulación proximal.
Esta enfermedad también puede surgir como resultado de una artritis inflamatoria o una osteoartritis, lo que puede resultar en un debilitamiento y estiramiento de los tejidos estabilizadores del mecanismo extensor.
Los síntomas más comunes incluyen inflamación y sensibilidad en la articulación intermedia del dedo. En lesiones severas o en casos que no se tratan rápidamente, el dedo puede flexionar en la posición característica de ojal.
En los casos de deformidad aguda, la articulación proximal no se mantiene en la posición normal por sí misma, sólo es posible con la ayuda de la otra mano. En los casos de deformidad crónica, la articulación puede tornarse dura y quedar en esa posición flexionada, no siendo posible enderezarse ni con uso de fuerza de la otra mano.
Las opciones de tratamiento pueden incluir el uso de una férula y fisioterapia. Sin embargo, en algunos casos, cuando el método conservador no se muestra eficaz, la cirugía es indicada. También podría ser necesario utilizar un “pin” a través de la articulación como un inmovilizador interno.